El cambio de estado de un iniciador es la fuente más frecuente e importante de eventos. Cada vez que el iniciador cambia de estado, se genera un evento. El evento contiene detalles del cambio del estado del iniciador: cuándo sucedió y cuál es el nuevo estado.
Los iniciadores crean dos tipos de eventos: Problema y OK.
Se crea un evento de problema:
Un evento OK cierra los eventos de problema relacionados y puede ser creado por 3 componentes:
Los iniciadores tienen una configuración de 'Generación de evento OK' que controla cómo se generan eventos OK:
Además, los iniciadores tienen una configuración de 'OK, se cierra el evento' que controla qué eventos problemáticos son cerrados:
La correlación de eventos (también llamada correlación de eventos global) es una forma de crear reglas personalizadas de cierre de eventos (que dan como resultado la generación de eventos OK).
Las reglas definen cómo se emparejan los nuevos eventos problemáticos con los eventos problemáticos existentes y permiten cerrar el nuevo evento o los eventos coincidentes mediante la generación de los correspondientes eventos OK.
Sin embargo, la correlación de eventos debe configurarse con mucho cuidado, ya que puede afectar negativamente el rendimiento del procesamiento de eventos o, si está mal configurada, cerrar más eventos de los previstos (en el peor de los casos, incluso todos los eventos de problema podrían cerrarse). Algunos consejos de configuración:
Si la configuración 'Permitir cierre manual' está habilitada para el iniciador, entonces es posible cerrar manualmente los eventos de problemas generados por el iniciador. Esto se realiza en la interfaz al actualizar un problema. El evento no es cerrado directamente; en su lugar, se crea una tarea de 'cerrar evento', que es manejada por el administrador de tareas a la mayor brevedad. El administrador de tareas generará el evento OK correspondiente y el evento de problema se cerrará.